sábado, 25 de enero de 2014

MI PUEBLO.



MI PUEBLO.

Dijo el gallo que amanece
en su canto escandaloso
y le da fin al reposo...
y al silencio que acontece;
la mañana se embellece
con el sol y su presencia,
pero no borra la ausencia
de mi pueblo y su mirada,
que está en mi pecho clavada
como luz de mi existencia.

No tienen culpa sus campos
de no tener mis pisadas,
ni sus calles adornadas
con sus colores y encantos;
pero en mí siguen sus cantos
en recuerdos y nostalgia,
de aquella gloriosa magia
de su gente apasionada,
del arte y verso inspirada
como un don que no se plagia.

Juro que en sueños he vuelto
y aunque parece distinto,
sigue siendo ese recinto
puesto en un paisaje esbelto...
donde quedaba resuelto
el miedo a las soledades,
los encuentros sin maldades
con los amigos de infancia
y la primera fragancia
del amor sin falsedades.

Hoy se torna en alegría
mi camino de viajero,
pues a paso más ligero
me uniré a la romería,
de los que también un día
como yo lo abandonaron,
pero no se cautivaron
con los soles de otra tierra,
pues su clamor nos aferra
como niños que lo amaron.

Juan Guillermo Mora Peña.

No hay comentarios:

Publicar un comentario